martes, 27 de enero de 2009

La selva de cemento

El otro dia vi en "Ranking Marcial" la promocion de un libro, se llama "estrategias de defensa personal o como sobrevivir a diario en la selva de cemento".
No lo he leido y tampoco creo que lo haga, pero debo decir que al leer la segunda parte del titulo no pude mas que sentir un leve escozor en el cuerpo.
Selva de cemento.
Cuando veo o escucho esta expresión, cuando gente invoca como razón de comprarse una pistola que "las cosas estan malas", o "es que afuera es una jungla", siento que se promueve una actitud casi paranóica en torno no solo a la ciudad sino a vivir.
Por que convengamos que efectivamente en las ciudades roban, hay asaltos, entra gente a las casas, eso es una realidad indesmentible, y hay gente que la ha pasado muy mal, es comprensible que para esas personas que han tenido estas experiencias eso sea absolutamente real,pero otra cosa es colgarse de algo asi o promover esa sensacion como algo real.
Por que no es real, no vivimos en una selva de cemento.
Yo no me preparo para vivir o morir dia a dia, no algo en una mision comando suicida, no ando viendo asaltantes en cada esquina ni la posibilidad de que me asalten, maten o quizas que otra cosa mas, y no se trata de tener una actitud despreocupada en torno al tema, sino todo lo contrario, aplico lo que el mismo camino del Budo me ha enseñado.
Ir sin prejuicios a enfrentar la vida, abierto a las posibilidades, a la accion, mente en blanco, sin prejuicios.
Que reaccion (o sobrereaccion) puede tener alguien que SIEMPRE anda paranóico, que anda en estado de guerra, en la jungla, en la selva de cemento donde todos son enemigos, donde debo proteger mi vida de la legion de personajes malignos que me asechan, de los cientos de lanzas que me van a colgar, de todas las personas que pueden entrar a mi casa y robarme, en fin....
Un artista marcial no puede caer en esa paranoia, es mas, no debe ENSEÑARLA, aprender a defenderse de algo no solo implica "estrategias" sino criterio, criterio de hasta donde puedo llegar, que puedo hacer, como me puedo desenvolver, y eso no se puede aprender con un manual o con un par de tecnicas, se desarolla con el tiempo, la practica y la vida, es cierto, en general la gente o no practica o no tiene ciertos conocimientos que un artista marcial si puede tener, y eso no asegura nada, un piedrazo o un balazo puede terminar con cualquier cinturon negro, sea el dan que sea, de que sirve estar siempre atento, no de mucho, generalmente las cosas , en la calle o en la vida, pasan justamente cuando bajamos la guardia.
Creo que la única enseñanza que es aplicable es el ir por la vida sin prejuicios, sin nada esablecido y fluir con la accion, si fluir con la accion signifa luchar o pasar la billetera dependerá del contexto en que estoy, pero no nos prejuiciemos con situaciones que solo pasan en el ideal, en la mente o en la teoria, la selva de cemento solo existe dentro de uno mismo, es lo que uno ve del mundo que se cuaja en la realidad, y claramente lo que uno busca siempre, tarde o temprano, se encuentra.

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Disfraz

Hay cosas que se pierden en el tiempo de cada cual, no logro recordar desde cuando me gustan las artes marciales, siento que desde siempre,posiblemente no es asi, sin embargo han estado presentes desde que tengo conocimiento o conciencia de ellas, por lo que no es raro que no pueda definir esto.
Quizás una de las cosas que me llamo la atención de la práctica de artes marciales es la vestimenta, los asi llamados "kimonos" ( en realidad los trajes de practica en artes marciales se llaman Gi y se le agrega la respectiva arte marcial, por ej: Karate gi, judogi, etc. Solo las mujeres o geishas usan, efectivamente , kimono) le daban un aire de otro mundo, exótico, marcaban una diferencia con lo conocido por nosotros en una generación mucho mas ailsada y desconectada del mundo que la actual.
Recuerdo que en canal 7 daban una serie de un samurai (hoy se que la serie se llama Long wolf) expulsado de su clan, el viajaba con una especie de coche de madera donde llevaba a su hijo, una de las cosas que me hacia alucinar eran los trajes de los samurais y, por supuesto, los sables.
Hasta que llego el dia donde me puse por primera vez un karategi, fue emocionante cuando me lo pasaron por primera vez, sentir la textura, el sonido de la tela al lanzar un golpe, el amarrarse el cinturon y ver el conjunto reflejado en el espejo no hacia mas que generar una sonrisa espontanea de orgullo, el karategi significaba el inicio de un romance que hasta hoy ha durado, como todo romance , con sus peleas y fricciones.
En ese primer tiempo sentia que al ponerme el karategi me transformaba,era casi una acción sagrada, por un rato ( el que durara la práctica) viajaba en el tiempo y espacio, comulgando con todos los guerreros antiguos, realizando formas y movimientos milenarios, siendo uno con esa gran corriente de seres humanos que transitaron por esa misma senda, el traje de Karate era algo mas que un traje, era un disfraz, una armadura, un escudo.
Con el tiempo, como siempre , las cosas van adquiriendo otro color, el traje fue perdiendo el significado, lo que no perdio significación fue la práctica, la comunión , la sociedad perfecta y justa de los guerreros.
Me imagino que mucha gente debe pensar al verme vestido asi que estoy "disfrazado", y que cosa mas rara,hoy pienso que cada vez que me saco mi keikogi, que doblo mi hakama y salgo a la calle o a la vida me disfrazo, ese no soy yo, cada vez que ando con mi keikogi me siento bien, cada vez que termina la clase y estoy con mis hermanos de practica me siento en paz, en familia, y ojo no es que no me importe mi familia, no, al contrario, pero en ese momento soy yo, alineado, equilibrado, en paz, cada vez que descargo un golpe con mi bokken, o hago girar un jo, cuando proyecto o soy proyectado siento plenitud y vida, cuando salgo y me siento en mi oficina me disfrazo de alguien que se parece a mi pero claramente no soy, y cada vez que realizo el ritual de amarrar mi keikogi, correr el nudo del cinturón y ponerme mi hakama vuelvo a ser yo, disfrazado... en el resto del dia, nunca con el keikogi puesto.

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Aikido

Simplemente quede con la boca abierta, no supe como expresar o decir lo que sentí en el momento en que ví por primera vez una técnica de Aikido, la primera vez que fui a ver a Aikikai Chile tenia 17 años, fue un amor a primera vista pero fue claramente un amor tortuoso.
En ese tiempo practicaba karate, y me gustaba (y me gusta) mucho, siempre disfrute las prácticas y claramente el arte marcial iba afectando mi vida sin darme cuenta o tener noción de ello.
Un dia un amigo de práctica me dijo "oye viste Nico", ¿y que es eso? - respondí. Es una pelicula re buena ,esta increible.
Me quedo rondando la pelicula, en ese tiempo dedicaba muchas HH (Horas Hombre) a ver peliculas de artes marciales, hubo de todo, desde Ninja Americano hasta Blood sport (traducida extrañamente como el gran dragon blanco), claramente escribire de esas "notables" peliculas en otra ocasion.
El asunto es que como usuario de Errol's (que viejazo) un dia encontre la susodicha pelicula y me la lleve a casa para verla, y la verdad, además de que es como la mejor o una de las mejores películas de Steven Seagal, me quede pegado con el inicio, como olvidar a Seagal sentandose con cara de pocos amigos, separando la hakama y realizando el saludo al kamiza, y luego las tecnicas relampago que dejaban al adversario noqueado sin que el lo supiera, un festival de huesos rotos y exactitud marcial.
Jamas habia escuchado siquiera mencionar la palabra "Aikido", por lo que cuando escuche por primera vez esa palabra fue como si me hablaran de otro planeta, al ver Nico fue encontrar algo que jamás pense que existiera, el enamoramiento comenzo.
Luego me encontre con la segunda sopresa ¡En Chile habia un lugar donde se hacia Aikido!, Aikido Aikikai con el maestro sensei Jorge Rojo, decidí hacer una expedición a este lugar para ver una clase.
Por circunstancias de la vida se fue dilatando la visita, hasta que un dia me hice el tiempo y fui a mirar, debo decir que al entrar tuve una sensacion de inquietud, pude pasar a mirar y la verdad fue descubrir un nuevo mundo, al ver los movimientos de Sensei Jorge fue una iluminación, nunca pense que existían técnicas semejantes, quede fascinado con ellas ya que parecían magicas, al salir tenia claro lo que quería hacer.
Pero no era tan sencillo, llevaba mucho tiempo haciendo Karate y era bueno, sentí que el solo pensar en dejar el Karate era traicionar a mi maestro, la culpa empezó a penetrar en mi mente, debo decir que yo me autocensure y finalmente deseche la idea.
Aun asi el bichito ya estaba y durante mucho tiempo iba a ver de vez en cuando las clases,siempre me causaban la misma impresion de armonía y equilibrio, hasta que pude volver a hacer artes marciales, tenia 30 años si no me equivoco.
Costo mucho sacarme, o mas bien, guardar el Karate en un cajon, educar mi cuerpo nuevamente, entender los conceptos detras de las técnicas, fue renacer, el Aikido fue trayendo poco a poco balance y equilibrio a mi vida, me sano, y creo que en cierta medida le debo hasta la vida.
Hoy practico frecuentemente, aun tengo mucho por aprender y eso me alegra por que para mi el Aikido es como una caja sin fondo, llena de sopresas y conocimiento, tratare de seguir la senda de la armonia, como ven hay amores que cuestan, pero el que busca encuentra,yo encontre mi camino.

martes, 4 de noviembre de 2008

Conflictos

Era definitivamente mas rapido que yo,habia entrenado mucho y me habia convertido en un toro, muy fuerte, pero muy lento, Sergio en cambio era flaco y rapido, sus puños huesudos golpeaban una y otra vez mi cuerpo, al contraatacar era como intentar golpear humo, se desvanecia en el aire lo que me creaba un profundo sentimiento de impotencia y rabia al no poder conectar ningun golpe.

Fue una paliza, no pude tocarlo practicamente y por cada golpe que alcanzo a rozarlo el me dio 10, el combate no terminaba nunca y parecía que iba a durar para siempre, de pronto la orden final, nos saludamos y me voy con la impresion de no haber podido hacer nada, de ser un fracaso, humillado me doy una ducha fria tratando de aclarar mi mente y pienso, ¿que paso?, ¿que fue?, ¿que hice mal?

Creo que esa pregunta me la he hecho en miles de contextos diferentes, a veces pareciera que uno se topa con situaciones o gente conflictiva, queriendo o no queriendo, barreras que parecieran imposibles de traspasar, muros gigantes y situaciones que parecieran no tener ninguna solución se nos vienen a la mente sin mucho esfuerzo, nuestra vida esta plagada de estos momentos, solo es cosa de recordar.

Y como enfrentar lo imposible, como encontrar la solucion a problemas gigantescos que parecieran no tenerlos, nosotros a veces nos auto ofrecemos una vision de la vida en negro, lo que dificulta el tomar decisiones o ir hacia adelante, lanzamos el ancla por la borda y nos quedamos anclados en el dolor, en el problema, en el conflicto.

Me gusta mucho una frase que sale en la pelicula "Corazon Valiente", es al principio, el papa de William Wallace dice en una reunión "no tenemos que ganar la batalla, solo tenemos que presentarnos", y creo que esa frase tiene mucho sentido, no en la linea de estar perdido, sino de tomar acciones que me permitan enfrentar ese conflicto de la mejor forma, sin prejuicios y sin acciones previas que me predefinan.

Es complejo por que estamos acostumbrados a atacar sin medir, a pasar por arriba sin ver, lo cual finalmente lo unico que crea es mas resentimiento, mas conflicto, mas oscuridad.
Despues de la ducha fria decidí cambiar mi entrenamiento, si bien seguí ejercitandome para generar fuerza tambien comenze a practicar ejercicios que me permitieran ser mas veloz, fue difícil al principio el ser mas veloz, pero poco a poco la velocidad fue aumentando hasta que pude llegar a no pensar el golpe, solo a desatarlo, unir cuerpo y mente en uno, deseo y accion sin separacion.
Por cosas de la vida volvi a combatir con Sergio, pero tenía una leccion aprendida por lo que me medi, no desate el golpe y simplemente me abri al combate, el resultado es que gane sin complicaciones, pero ojo, para ganar tuve que perder, tuve que pasar por un proceso, y eso se aplica no solo a las artes marciales sino a la vida misma.

Por ultimo y lo mas importante, los conflictos no se resuelven de a uno, siempre hay un otro que puede tener una vision o una película diferente, como artistas marciales conocemos esa conexión, y es en ella donde reside la solucion de cualquier conflicto, en la union honesta y perfecta de dos voluntades que deciden construir.

jueves, 23 de octubre de 2008

Ira


Era un dia de practica cualquiera, estabamos haciendo un mini torneo en el dojo, era combate deportivo, no implicaba mucho contacto, mas bien rapidez, comenzamos las rondas y fui pasando sistematicamente hasta llegar al combate final, creo que era cinturon azul y el contrincante naranja.
La verdad hoy al tratar de mirar atras no logro recordarlo del todo, la cara de mi contrincante me parece difusa y claramente si lo encontrara en la calle no lo reconoceria, sin embargo recuerdo su actitud y su mirada de desafío cuando se puso frente a mi.
Al comenzar el combate me dio un mawashi con toda su potencia, quedé algo consternado por que no era la idea del combate, lo deje pasar pensando que habia sido una sobrereaccion de el.
El combate paro y prosiguio,lanzó un tsuki con toda su fuerza, no apuntó el golpe a una zona de puntuacion (en combate deportiva hay zonas del cuerpo que dan puntos), el lo sabia, recuerdo haberlo mirado y ver un destello de desafio en los ojos, ya me era obvia la intención, pero decidi controlarme y obviar el desafío que me estaba entregando sin palabras.
Trate de volver al contexto del combate pero comenzé a sentir algo que jamás habia sentido hasta ese momento, ira en combate, nuevamente se reanuda el combate y lanza un Mae Geri que si hubiera impactado en mi cuerpo posiblemente me hubiera hecho un daño serio,un tsuki rozó mi cara y solo porque me moví rápido fui capaz de esquivar el golpe, en ese instante algo hizo click dentro de mi, y deje que mi ira pasara a ocupar el lugar de mi conciencia, tomando el control de la situación.
Al reanudar el combate me habia convertido en una máquina, partí saltando y lanzando un Yoko tobi geri al pecho, y literalmente lo hice volar sobre las cabezas de nuestros compañeros (estaban todos en hanza rodeandonos)se quedó un momento en el suelo y se paro con la cara descompuesta, aún brillaba el desafio en sus ojos pero tambien habia una sombra de temor, al reanudar el combate me fui con todo encima de el , con rabia, como se atrevia a desafiarme, lo golpee tanto que en un momento vi lagrimas en sus ojos, vi miedo, fue tanto que me lanzo un golpe a la cara (en combate deportivo no se permite el golpe directo a la cara) quizás para parar la avalancha de golpes que le estaba dando,su golpe dio directo en mi labio,lo que logro que me enfureciera aun mas y lo golpeara aun mas rápido y fuerte,los golpes eran tan rapidos y tan continuados que practicamente no habia pausa entre uno y otro, el combate se convirtio en una practica con saco.
Pararon el combate, los ojos de el estaban llenos de lagrimas, humillado y haciendo esfuerzos para no largarse a llorar, su cuerpo temblaba, quizás de impotencia, de miedo o de coraje, no lo se, no volvió a mirarme mas, fui declarado ganador del combate y felicitado por todos, sin embargo sentí un gusto amargo que no pude explicarme.
En los camerinos recién pude ver mi cara, el labio estaba hinchado del impacto y senti un poco de sangre en la boca, claramente el golpe fue mas fuerte de lo que pensé, me topé con mi contrincante en los camerinos y no pude mirarlo, senti que era impropio, senti verguenza.
Que sentido tiene golpear a alguien mas débil que tu, que victoria es la que se toma a la fuerza, desatando el animal o la bestia que todos llevamos dentro,hoy al mirar atras no entiendo como pude golpear a alguien tan fuerte y humillarlo delante de todos, podría haber renunciado, podría haber respetado el contexto, podría haber elejido perder, pero mi orgullo, mi ira, fueron mas que yo, me llevaron a atacar y a romper el balance, es cierto, el lo habia roto primero, sin embargo yo termine de desequilibrar, de ahi me prometi nunca mas dejarme llevar por mi ira, por mi rabia, y cuesta, esta tan a flor de piel que cuesta renunciar a ello, la Ira es un enemigo que siempre esta ahi, esperando su momento, no solo en las artes marciales, sino en la vida.
Si dejas que te domine la bestia ella tomara el control, la bestia es fuerte pero tambien es violenta, un artista marcial debe ser capaz de balancear los opuestos y conseguir el equilibrio.
En la pelicula Kuro Obi (quizás escriba sobre eso en otra ocasion), un maestro de Karate dice, "en karate no existe el primer golpe" y claramente esa es la escencia no solo del karate sino de las artes marciales, espero nunca mas dar ese primer golpe

miércoles, 15 de octubre de 2008

Meditación

Creo que hay una serie de fracturas mentales para nosotros como occidentales cuando intentamos entender y aprehender el concepto oriental de meditación, estas están dadas claramente por nuestros marcos de referencias culturales.
Cuando niño fui a colegio de curas, recuerdo que siempre se daba un espacio (despues de rezar por cierto) para una pequeña "meditación personal", donde uno cerraba los ojos y "meditaba" sobre sus pecados, errores , etc.
El primer punto es que desde la religión católica se enfoca la meditacion como una serie de pensamientos que buscan el encontrar las malas acciones que tu puedas haber hecho en el dia o en el mes, es decir la meditación está atada a la reflexión de lo malo y a pensar en lo bueno,yo "pienso" mi pecado para poder repararlo, esto es interesante por que por ejemplo el acto de la confesión es un acto eminentemente intelectual (el castigo de rezar padres nuestros o aves marias, ¿como va a ser castigo rezar a Dios?.
Sin ir mas lejos el filosofo Descartes basa todas sus tesis en las "meditaciones metafisicas", piedra angular del pensamiento occidental donde Descartes, premunido solo de su intelecto, lo unico que el sabe es que existe, es capaz de levantar una visión del mundo y de las cosas que marco a fuego el pensamiento filosófico de Occidente.
LLevaba como dos años de practica de Aikido (eso en Aikido es nada) cuando un dia practique con un compañero relativamente nuevo, el hacia la técnica y se quedaba en la mitad parado con los ojos cerrados, la verdad no entendía que le pasaba hasta que, demasiado curioso, le pregunte por que paraba cada cierto tiempo, el me quedo mirando con altanería y me dijo " hago las tecnicas y medito, por que el Aikido es meditacion en movimiento"(esa frase sale en el folleto de presentación de Aikikai, al menos hasta donde recuerdo.)
Meditacion en movimiento...., claramente si lo tomamos en forma literal nuestro amigo tendría razón, pero si nos adentramos un poco en el concepto de meditación oriental nos daremos cuenta que además de un gran error hay bases que son tan diferentes como el cielo y tierra.
Partiremos por definir que en Oriente tampoco existe una única forma de meditación, muchos por ejemplo confunden los ejercicios y formas shinto con formas budistas de meditación y viceversa, hablaré aqui de la forma de meditación que me es mas conocida, la budista zen.
En ella uno debe realizar Zazen, sentarse y eliminar todo pensamiento, sentir el aqui y el ahora, estoy en este momento, en este lugar, pienso, respiro y soy hoy y ahora, no existe pasado ni presente sino solo este momento, sientalo y vivalo como lo que es, el hoy.
Suena bonito pero intente hacerlo y se dará cuenta que no solo no es fácil sino que prácticamente imposible para alguien que viene de nuestro marco intelectual y que no tiene mayor experiencia o cercanía con el mundo Oriental. Fijar la mente en aqui y ahora cuando hemos aprendido que meditar es pensar, es llenar la cabeza de imagenes y conceptos que dialogan parece una quimera, un imposible, a nosotros como Occidentales que no tenemos una matriz mental oriental nos resulta doblemente dificil el aprender a meditar, ya que además de las trabas que ya existen como ser humano existen mis propias trabas culturales, dadas por nuestra filosofía y nuestra religión.
El estar aqui y ahora exige abrir un cajon y guardar mis visiones sobre el pensamiento, ¿cuantos pasan el dia pensando en lo que fue, bebiendo el trago amargo del pasado?, ¿cuantos otros meditamos sobre el futuro incierto que se avecina, y dejamos el hoy, el ahora, el unico momento verdaderamente real fuera de nuestro marco?.
Vivir el aqui y ahora nos puede enseñar a meditar, en el verdadero sentido de la palabra, un ejercicio de libertad espiritual y paz mental, solo practicándola con ahinco podremos realmente limpiar las manchas de la mente, hacer meditacion en movimiento....

jueves, 9 de octubre de 2008

José Huenchunao

Era verano de 1994, creo, al mencionarlo así pareciera que fue hace un siglo, lo cual si somos rigurosos es verdad. Era mucho mas joven y mas ingenuo que ahora (lo cual no es merito alguno solo estaba dado por la edad) y me enfrentaba a mi primer terreno, además en una comunidad mapuche (Ranquilhue) creo que fue el mejor terreno que he hecho en mi vida ya que marco a fuego muchas perspectivas que aun tengo de la antropología y de lo que significa para mi el trabajo en terreno.

En ese terreno conocí a Jose Huenchunao, cuando evoco su recuerdo en mi mente siempre sonrío, lo conocimos como parte de los entonces dirigentes jóvenes de las comunidades mapuches, se veía solo con hablar con el un par de minutos que era un gran líder, como lo ha demostrado hasta hoy.

El no sabia que iba a ser de su vida ni yo tampoco, recuerdo que cuando hablamos del movimiento mapuche el me señalo que los movimientos que estaban en ese entonces no eran representativos de los Mapuches, estaban intervenidos por el interés político de los partidos y por lo tanto del mundo huinca, el pensaba que era necesario refundar los movimientos mapuches para que no solo fueran representativos sino que recogieran las estructuras tradicionales y culturales de su pueblo de su gente, su idea no era solo generar un grupo mas, sino que era cortar con las cadenas que ataban aun a su pueblo con una camisa de fuerza que los obligaba a bailar con las mismas estructuras de un estado que no les es propio y con una mentalidad que les es ajena y excluyente.

Mientras el hablaba sentía verdad en sus palabras, como no la sentí jamás con nadie hasta hoy, emanaba tranquilidad y paz, nunca he visto a un ser que convoque tanta paz a su alrededor, la fuerza de Jose se encontraba en sus firmes convicciones y al mismo tiempo en esa tranquilidad abrumadora, en la sonrisa franca y sincera, en el trato correcto y sincero.

Nos quedamos con algunos compañeros (éramos 4 en total) en la sala comunitaria de Ranquilhue, recuerdo que un día estaba solo en la sala y Jose apareció abruptamente. Y ante mis ojos se produjo una transformación, Jose el joven afable y sincero se transformo de un momento a otro en un puma, sus movimientos se hicieron casi imperceptibles y sus pasos se hicieron cada vez mas lentos hasta que me pareció que no tocaba el suelo ni movía el pasto, me hablo con los ojos como solo lo podría hacer quien conoce el idioma del silencio y solo movió ligeramente la cabeza, y ahí justo en el medio del pasto apareció.

Una liebre.

Una liebre orejona y gorda.

La cara de Jose parecía la de un halcón a punto de caer sobre ella, con pequeños gestos me indico que me parara mientras seguía avanzando hacia la liebre, la cual no acusaba recibo de tener idea de que estaba siendo cazada, moviendo los labios suavemente me pregunto por Lenin, el perro de la profesora mezcla de pastor alemán con cualquier cosa que estaba en la escuela y que generalmente nos acompañaba.

Yo estaba tenso, trataba de hablar en el idioma de Jose y llamar a Lenin con el idioma del silencio pero lamentablemente desconocía como hablarlo, Lenin miraba perezosamente sin darse por aludido mientras la liebre seguía allí, sin dar señales de miedo.

En un acuerdo tácito nos movimos juntos, cuando sonó un ruido casi imperceptible, el ruido de mis jeans al rozar el zapato, y fue como si el mundo volviera a girar, la liebre se movió y Jose casi la atrapo, lo cual hubiera sido una hazaña de proporciones, por escasos centímetros nos perdimos un buen estofado de liebre, el cual tengo la certeza que Jose debe saber hacer y que debe de haber comido en sus tiempos de clandestinidad, pero en ese momento mas inocente para ambos la liebre arranco.

Me sentí como un aprendiz frente al maestro, me dio vergüenza y pena haber perdido nuestra presa, pero al mirar nuevamente a Jose había desaparecido el cazador, solo quedaba nuevamente Jose, el joven afable y sereno, el cual solo me devolvió una sonrisa sin malicia y sin reproches.

Nos venia a invitar a su casa, como no había nadie partí con el, por suerte el destino quiso que nos encontráramos todos y al final fuimos los cuatro a su casa en el Malo, nos atendió su madre y comimos la cazuela mas rica que haya comido en mi vida, las arbejas eran gigantes, nunca he visto ni mas grandes ni mas sabrosas, a la luz de la ampolleta prendida con una batería conversamos sobre el futuro de su pueblo y sobre sueños de jóvenes, al final los cuatro salimos contentos de esa noche de camaradería, una noche sincera con un hombre notable.

Dejamos las direcciones y nos devolvimos a Santiago, y no volví a ver a Jose hasta prácticamente un año después, en mi universidad, fue una sorpresa por que no esperaba encontrarlo y lo divise conversando con un grupo de compañeros, al verme me reconoció y apareció la sonrisa de siempre, pero estaba rodeado de gente así que nos hicimos un gesto de que después hablaríamos, en ese tiempo ya Jose empezaba a ser el líder que es hoy, después al buscarlo se había ido, esa fue la ultima vez que vi a José.

Luego comenzaron las notas de prensa y los apellidos, “terrorista, guerrillero, radical”, luego vinieron las acusaciones de incendio, la clandestinidad y la cárcel, Hoy José se encuentra en la cárcel de Angol, lo ultimo que pude ver de José es que le prohibieron cocinar y hacer su dieta (tiene serios problemas estomacales) a su modulo llevaron reos condenados por violación y abusos sexuales, y José hizo lo que siempre ha hecho, afrontar el problema con serenidad, comenzó una huelga de hambre el día 11 de agosto del 2008, la vida es irónica y llena de símbolos, el 11 de Agosto es mi cumpleaños.

Cuando pienso en José siento una profunda tristeza, tomamos caminos tan diferentes como el cielo y la tierra, y aun hoy pienso en lo coherente que fue, en el camino que ha trazado, siento pena por el amigo que pudo ser, por el líder que es y será siempre, por su claridad y consecuencia, y cuando escucho a gente hablar de el como si fuera un terrorista no me queda mas que reírme de tanta estupidez, nuevamente el estado chileno pasa encima de lo diferente, de lo que no puede entender.

José el cazador de liebres, el hombre simple y atento, siempre lo recordaré como el mejor hombre que he conocido en mi vida, de los de verdad no de cartón piedra, donde quiera que tu camino te lleve espero sepas que siempre te llevare en mi memoria con orgullo, me imagino que en otras condiciones pudimos ser grandes amigos, pero quien sabe, la vida tiene muchas vueltas, quizás algún día volvamos a cazar juntos, prometo hablar con el idioma del silencio, para mi mas que un líder tu siempre serás antes un buen ser humano, quizás el mejor que conocí.